Entrevista a los expertos El Barón Sanguinario |
¡Bienvenidos y bienvenidas a una última entrega del especial sobre fantasmas de Hogwarts! Aquí Rhiannon Griffiths. Para refrescaros la memoria, una serie de expertos en la materia nos conceden una entrevista en la que nos hablan de ellos. No de cuaquieras, sino de aquellos que repreentan a cada casa del colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. En esta ocasión, para hablar de El Barón Sanguinario, ha venido Mordecai Stone.
¡Saludos, señor Storne! Un placer tenerlo aquí, gracias por dedicarnos su tiempo. |
Gracias a usted, señora Griffiths, es un honor que me haya aceptado para hablar del que fue el fantasma de mi casa: El Barón Sanguinario. |
Así que usted fue Slytherin. Como miembro de esa casa, ¿cómo fue su relación con el fantasma? |
El Barón Sanguinario no era precisamente amistoso, ni con los miembros de la casa. Mucho menos con los demás, he de decir. |
¿Llegó a intercambiar palabra con él? |
No demasiadas. En realidad, ahora mismo no puedo decirte una situación en concreta en la que lo hiciera, puesto que jamás llegué a molestarle. |
Entonces, ¿de dónde surgió su interés en El Barón Sanguinario? |
Que no habláramos, y mantuviera la distancia con él, no implica que no me provocara curiosidad. Era fascinante, he de decir. Cómo, a pesar de ser un mero espectro, la gente le temía. Al principio me preguntaba por qué, y después supe que la imagen, y la historia, hacía el resto. |
¿A qué se refiere usted? |
El Barón Sanguinario tiene un aspecto bastante tenebroso, no sé si lo ha visto alguna vez. |
No, no asistí a Hogwarts. |
Pues de ahí sale el apodo que le dieron, pues nadie conoce su nombre real. Está cubierto de sangre, y no es suya. |
Ya me imagino, ya... |
¿Sabe la historia de El Barón Sanguinario y la Dama Gris? |
Sí, de ella hemos hablado en otra entrega. Una historia escalofriante. |
Lo es. Fue un hombre que perteneció a una época muy distinta, y con unas costumbres e ideales que no concuerdan con los que tenemos hoy en día. |
Cierto, pero aún así no justifica lo que hizo. |
Claro que no, nada lo hace, soy consciente de ello. Sin embargo, no dejan de ser detalles importantes. El contexto histórico siempre hay que tenerlo en cuenta. |
Supongo que tienes razón. |
Además, era un hombre de la alta sociedad. Un noble está acostumbrado a que siempre cumplan sus deseos, y ver cómo lo rechazaban, sentirlo en su propia piel, fue algo nuevo. |
No sabía que era noble. |
Sí, y no es que le enseñen a controlar y saber gestionar sus emociones. La Dama Gris no solo fue víctima de El Barón Sanguinario, sino de la sociedad. |
¿Y qué le pasó cuando El Barón Sanguinario murió? |
Volvió junto a Helena Ravenclaw a Hogwarts, convirtiéndose justamente en eso, El Barón Sanguinario. Posiblemente lo hizo porque era a lo que estaba acostumbrado, o, también, para mostrar su arrepentimiento de por vida, pues así fue como se sintió después de lo que hizo. |
Un poco tarde, ciertamente. |
Completamente de acuerdo. Probablemente Helena no está de acuerdo con su elección, pero El Barón Sanguinario la tomó por sí mismo. No estaba acostumbrado tampoco a pedir opiniones. |
¿Han hablado entre sí desde entonces? |
No hay constancia de ello. Al menos, no la tengo yo, pero realmente espero que no. |
Su estancia en el castillo habrá dado para mucho, supongo. ¿Qué era lo que El Barón Sanguinario se dedicaba a hacer? |
Queriéndolo o no, a aterrorizar a los estudiantes. No solía interactuar demasiado con ellos, pero la reputación que tenía daba para mucho. Además, su aspecto no lo mejoraba. No solo lo temían los vivos, en realidad. |
¿También los fantasmas? |
El poltergeist del colegio, Peeves. El Barón Sanguinario era el único que podía controlarlo, y eso era mucho decir. |
Fue un hombre bastante... horrible, ciertamente |
Solo mejoro como fantasma, aunque no demasiado. |
Podría decirse así. Muchas gracias por hablarnos de El Barón Sanguinario, señor Stone. |
Mordecai está bien. Gracias a usted, señora Griffiths. |
¡Gracias por leernos, lectores! |